ALERGIA AL NÍQUEL
ALERGIA
AL NÍQUEL
En
la consulta médica diaria es común que las jovencitas concurran debido a que presentan
una serie de erupciones en la zona de inserción de los pendientes en los
lóbulos de las orejas, o en la región en que la piel se encuentra en contacto
con el botón del Jean; esta es una afección de la piel del tipo alérgico, no es
contagiosa ni peligrosa, pero sí anti estética.
La
alergia al níquel pertenece al grupo de enfermedades llamadas dermatitis por
contacto. Se llama dermatitis a la inflamación local de la piel, que
habitualmente se manifiesta con enrojecimiento y picor local. Las causas son
muy variadas, desde el roce y sustancias irritantes hasta contacto con
alérgenos, es decir, sustancias que pueden producir una alergia en ciertas
personas. En el mecanismo de la alergia el protagonista principal es el sistema
inmunológico, que está formado por células capaces de reconocer moléculas
externas y atacarlas si las consideran malignas. Esto es muy útil en las
infecciones, pero puede volverse en nuestra contra cuando el sistema inmune se
equivoca y ataca a moléculas de nuestro propio cuerpo.
El
caso de la alergia al níquel es relativamente frecuente, ya que se trata de un
metal utilizado en utensilios que la mayoría utilizamos a diario (botones,
bisutería, monedas, teléfonos…), aunque por supuesto no a todo el mundo le
causa una reacción alérgica, sí que el contacto constante con este metal puede
acabar causando este tipo de dermatitis.
Los
síntomas de la alergia al níquel son variados, pero casi siempre son locales,
es decir, aparecen en el lugar donde el níquel entra en contacto con la piel.
Suele comenzar con enrojecimiento, inflamación y picor local más o menos
intenso. Con el paso del tiempo las lesiones de dermatitis adquieren un aspecto
más rugoso y seco, y la piel se puede engrosar y fisurar.
El
diagnóstico de este tipo de alergia es esencialmente clínico, es decir, un
dermatólogo con experiencia puede diagnosticar una alergia al níquel sólo con
la entrevista clínica y la exploración adecuada de la piel del paciente. Para
confirmar el diagnóstico se deben realizar pruebas de contacto, que consisten
en provocar la dermatitis por níquel en un área concreta de la piel.
La
base del tratamiento de la alergia al níquel es la eliminación del níquel de la
vida diaria, evitando entrar en contacto con objetos fabricados con este metal.
Esto puede ser un problema en ciertas profesiones, pero debe realizarse para
evitar la dermatitis. Cuando la dermatitis está ya establecida se pueden
utilizar corticoides en forma de cremas o pomadas que mejoran las lesiones
rápidamente.
Las
complicaciones en personas con alergia al níquel son poco frecuentes, pero
puede aparecer una sobreinfección local de las lesiones de la piel. Incluso se
han descrito casos anecdóticos de dermatitis generalizadas por ingesta de
níquel.
Causas
El
níquel es un metal muy utilizado y se encuentra en muchos objetos metálicos de
aspecto plateado. Cualquier persona puede no ser alérgica al níquel y volverse alérgica
con el paso del tiempo, aunque es más frecuente en mujeres por el uso de bisutería.
La
alergia al níquel se desarrolla cuando partículas milimétricas del metal
atraviesan la piel y son detectadas por células del sistema inmunológico en
personas predispuestas. Cuando el objeto fabricado con níquel es de mala
calidad el paso de partículas hacia la piel es mayor. También hay más riesgo de
alergia al níquel si el metal entra en contacto con áreas de la piel dañadas
por heridas o rozaduras.
El
níquel ha sido un metal muy utilizado en cualquier país del mundo porque
permite fabricar utensilios metálicos, de aspecto plateado, con un coste
adecuado y una calidad apropiada. Los objetos que suelen tener niveles elevados
de níquel en su composición son:
·
Mangos de
herramientas y utensilios.
·
Pendientes,
collares y otros elementos de bisutería.
·
Relojes de
pulsera.
·
Teléfonos móviles
y Smartphone.
·
Piercings.
·
Botones y
broches.
·
Monedas.
·
Oro blanco.
·
Productos químicos
industriales.
Si
nos fijamos en esta lista de productos, entendemos que muchas personas están en
contacto con el níquel diariamente, pero en realidad poca gente desarrolla
alergia a este metal. Sin embargo, el riesgo de desarrollar alergia puede ser
mayor en personas con contacto constante con el níquel, como sucede en aquellas
que llevan pendientes, piercing, o relojes fabricados con este material.
Debido
a su popularidad, el níquel se ha confirmado como el metal que más alergias
provoca. De hecho, el 19% de las pruebas de alergia dan positivas al níquel,
incluso si no hay una sospecha de alergia inicial.
Síntomas
La
alergia al níquel produce lesiones en la piel conocidas como dermatitis. Las
dermatitis son inflamaciones locales de la piel con picor como síntoma
principal y con eczemas como manifestación clínica.
El
eczema es una de las patologías más frecuentes en la dermatología, y consiste
en una reacción anormal de la piel ante un estímulo, que en el caso del níquel
viene del exterior. A La forma del eczema varía con el paso del tiempo, y se
reconocen tres etapas que podemos asociar con los síntomas de la alergia al níquel:
1.
Eczema agudo:
puede suceder inmediatamente después del contacto con el níquel. En esta etapa
destaca el enrojecimiento y la inflamación, que puede producir incluso pequeñas
ampollas en la superficie con líquido claro dentro que al romperse mojan la
zona.
2.
Eczema subagudo: cuando el eczema evoluciona aparece una zona más seca con un
enrojecimiento menos intenso, pero donde persiste el picor. En esta etapa se
produce una descamación de la piel fina.
3.
Eczema crónico:
tras varios días, incluso meses, de contacto con el níquel, el eczema adquiere
un aspecto mucho más seco, con descamación muy gruesa e incluso formación de
fisuras y heridas en la superficie. Además, el rascado continuo de la zona
produce una reacción de la piel llamada liquenificacion, que es un
engrosamiento de la piel muy marcado.
Diagnóstico
El
diagnóstico de la alergia al níquel es básicamente clínico, es decir, suele ser
suficiente con una consulta médica donde el dermatólogo sepa identificar las
lesiones típicas de la dermatitis de contacto y haga un interrogatorio dirigido
a la sospecha de alergia.
Ciertas
localizaciones de los eczemas pueden ayudar a diagnosticar una dermatitis de
contacto producida por alergia al níquel:
Manos: las utilizamos diariamente agarrando utensilios que
pueden tener níquel. Se debe preguntar por objetos de uso diario y mantenido en
el tiempo (mangos de herramientas, material deportivo, etcétera).
Muñecas: sitio frecuente de roce de relojes de pulseras
fabricados con níquel, suele ocurrir más en la mano izquierda.
Lóbulos
de orejas: los pendientes son uno
de los objetos que provocan alergia al níquel con más frecuencia. Cuando los lóbulos
presentan eczema al mismo tiempo se debe estudiar una alergia al níquel.
Parte
inferior del abdomen: justo
debajo del ombligo los botones de pantalones pueden rozar con la piel, y si
tienen níquel producen dermatitis de contacto.
Para
confirmar una alergia al níquel sospechada se deben realizar pruebas de
contacto en una unidad hospitalaria con experiencia. Se trata de provocar una
dermatitis localizada en otra región del cuerpo (la espalda habitualmente)
aplicando diferentes sustancias, entre ellas el níquel.
Hay
que tener en cuenta que cualquier persona puede ser sensible al níquel y dar
positivo en las pruebas de contacto, de hecho el 19% de las pruebas de contacto
realizadas por otro motivo dan positivo para níquel sin que signifique que una
persona es alérgica. Por ello es muy importante realizar un diagnóstico clínico
y que las pruebas sólo se utilicen para confirmarlo.
Tratamiento
No
existe un tratamiento de la alergia al níquel una vez que está desarrollada. Al
día de hoy no conocemos una forma de alterar la respuesta inmunológica anómala
contra el níquel. Por ello, lo primero que se recomienda a alguien que sufre
este problema es evitar el contacto directo en su vida diaria con este metal.
Lo
que sí podemos hacer es tratar las lesiones de dermatitis por contacto cuando están
producidas por el níquel. El tratamiento de los eczemas se basa en cremas y
pomadas compuestas de corticoides a diferentes concentraciones y de diferente
potencia. Estas cremas tienen un efecto antiinflamatorio local y hacen
desaparecer los eczemas a los pocos días, dejando un leve cambio de color en la
piel afectada que desaparece con el paso del tiempo. Los corticoides tópicos
son seguros, pero se deben utilizar en periodos cortos de tiempo para evitar
efectos secundarios locales.
Si
la dermatitis es muy extensa o tenemos la sospecha de una dermatitis sistémica
se pueden utilizar corticoides orales en forma de pastillas. También tienen un
efecto antiinflamatorio, en este caso global, y hacen que las lesiones de la
piel se solucionen rápido. Al igual que pasa con las cremas, su uso debe ser
limitado en el tiempo.
Realmente intetesante el tema
ResponderEliminarTengo alergia en la parte superior del empeine en ambos pies y en la muñeca derecha, he tratado con diferentes cremas y no ha funcionado. Encontré un líquido MICODERM SOLUCION que al parecer esta empezando a funcionar pero al momento de su aplicación genera muchísimo picor y arde mucho. Lo he estado usando son prescripción médica y no se por cuanto tiempo debo hacerlo.
ResponderEliminarTengo alergia en la parte superior del empeine en ambos pies y en la muñeca derecha, he tratado con diferentes cremas y no ha funcionado. Encontré un líquido MICODERM SOLUCION que al parecer esta empezando a funcionar pero al momento de su aplicación genera muchísimo picor y arde mucho. Lo he estado usando son prescripción médica y no se por cuanto tiempo debo hacerlo.
ResponderEliminarTengo alergia en la parte superior del empeine en ambos pies y en la muñeca derecha, he tratado con diferentes cremas y no ha funcionado. Encontré un líquido MICODERM SOLUCION que al parecer esta empezando a funcionar pero al momento de su aplicación genera muchísimo picor y arde mucho. Lo he estado usando son prescripción médica y no se por cuanto tiempo debo hacerlo.
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