VARICELA

VARICELA

La varicela es una enfermedad eruptiva causada por el virus varicela zóster. Habitualmente se presenta en los niños menores de 12 años, siendo menos frecuentes en los adultos.

Cómo se contagia

De madre a hijo durante el embarazo, parto o lactancia.

Por el aire (tos o estornudos).

Por contacto piel con piel (apretones de manos o abrazos).

Por la saliva (besos o bebidas compartidas).

Por contacto de una superficie contaminada (manta o pomo de la puerta).

Síntomas

La varicela causa una erupción cutánea en forma de ampollas de color rojo que producen picazón en la piel y pueden acompañarse de fiebre, malestar general, dolor de garganta, dolor abdominal o cefalea.

Dicha erupción aparece primero en el abdomen, en la cara o espalda y luego se propaga a casi todas las partes del cuerpo, incluidos el cuero cabelludo, la boca, la nariz, las orejas y los genitales.

La erupción comienza con varios bultos rojos pequeños que parecen granos o picaduras de insectos. Luego se transforman en ampollas con un líquido transparente. Cuando las ampollas se revientan, dejan pequeñas heridas abiertas que, al secarse, generan una costra de color marrón.

Por lo general, los síntomas desaparecen por sí solos. Sin embargo, debido a que la infección es muy contagiosa, se recomienda que un niño con la enfermedad permanezca en su casa y descanse hasta que los síntomas desaparezcan. Para evitar que el virus se propague, asegúrese que sus hijos se laven las manos frecuentemente, en particular antes de comer y después de ir al baño. Si su hijo tiene varicela, manténgalo lo más alejado posible de los hermanos que no estén vacunados.

Para evitar que los niños contraigan dicho virus, deben recibir la vacuna contra la varicela, que suele administrarse cuando los niños tienen entre 12 y 15 meses y refuerzo a niños de entre 4 y 6 años para una mayor protección.

Asimismo, se recomienda la administración de dos dosis de la vacuna con un intervalo de 28 días como mínimo a personas de 13 años o más que nunca hayan tenido varicela y no se habían vacunado previamente.

Generalmente, una persona tiene un episodio de varicela en su vida, pero el virus que causa la varicela puede permanecer en el cuerpo en estado latente y manifestarse en un tipo de erupción cutánea diferente conocido como culebrilla o herpes zóster.

La varicela es causada por un virus, por lo que no se indican antibióticos. Sin embargo, es posible que se requieran antibióticos si las heridas se infectan con bacterias. En algunos casos puede indicarse un medicamento antiviral, a las personas con varicela que corren el riesgo de tener complicaciones. El médico puede indicar si el medicamento es adecuado para su hijo.

Es importante evitar que el niño se rasque las lesiones para lo cual, puede cubrir las manos de su hijo con guantes o medias para evitar que se rasque mientras duerme. Además, puede cortarle las uñas y mantenerlas limpias para disminuir los efectos por haberse rascado, incluidas las ampollas abiertas y la infección.

Nunca debe administrarse aspirina para bajar la fiebre o disminuir el dolor en niños con varicela, ya que puede asociarse con una enfermedad grave conocida como síndrome de Reye, la cual puede producir insuficiencia hepática e incluso la muerte.

Fuente: Doctorvid.