ACCIDENTE CEREBROVASCULAR O “DERRAME CEREBRAL”. PERCY ZAPATA MENDO.
ACCIDENTE
CEREBROVASCULAR O “DERRAME CEREBRAL”
El
derrame cerebral es una interrupción del suministro de sangre a cualquier parte
del cerebro y, algunas veces, se le denomina "ataque cerebral".
Las causas
Un
accidente cerebrovascular sucede cuando el flujo sanguíneo a una parte del
cerebro se interrumpe debido a que un vaso sanguíneo en dicho órgano se bloquea
o se rompe.
Si
se detiene el flujo sanguíneo durante más de unos pocos segundos, el cerebro no
puede recibir sangre y oxígeno. Las células cerebrales pueden morir, causando
daño permanente.
Hay
dos tipos principales de accidente cerebrovascular: accidente cerebrovascular
isquémico y accidente cerebrovascular hemorrágico.
ACCIDENTE CEREBROVASCULAR ISQUÉMICO
El
accidente cerebrovascular isquémico ocurre cuando un vaso sanguíneo que irriga
sangre al cerebro resulta bloqueado por un coágulo de sangre. Esto puede
suceder de dos maneras:
- Se puede
formar un coágulo en una arteria que ya está muy estrecha, lo cual se
denomina trombo. Si bloquea la arteria completamente, se denomina un accidente
cerebrovascular trombótico.
- Un coágulo
se puede desprender desde otro lugar en los vasos sanguíneos del cerebro o
alguna parte en el cuerpo y subir hasta el cerebro para bloquear una
arteria más pequeña. Esto se denomina embolia y causa un accidente
cerebrovascular embólico.
Los
accidentes cerebrovasculares isquémicos pueden resultar del taponamiento de las
arterias, una afección llamada ateroesclerosis. Esto puede afectar las arterias
dentro del cerebro o las arterias en el cuello que llevan sangre al cerebro. La
grasa, el colesterol y otras sustancias se acumulan en la pared de las arterias
formando una sustancia pegajosa llamada placa. Con el tiempo, la placa se
acumula. Esto a menudo dificulta el flujo apropiado de la sangre, lo cual puede
provocar que ésta se coagule.
Los
accidentes cerebrovasculares isquémicos también pueden ser causados por
coágulos de sangre que se forman en el corazón u otras partes del cuerpo. Estos
coágulos viajan a través de la sangre y pueden atascarse en las pequeñas
arterias del cerebro, lo cual se conoce como embolia cerebral.
Ciertos
fármacos y afecciones médicas pueden hacer que la sangre sea más susceptible de
coagularse y elevan el riesgo de accidente cerebrovascular isquémico. Una causa
común de accidente cerebrovascular isquémico en personas menores de 40 años es
la disección carotídea o una ruptura en el revestimiento de la arteria
carótida. La ruptura permite el flujo de sangre entre las capas de esta
arteria. Esto causa estrechamiento de la arteria que no se debe a la
acumulación de placa.
Algunos
accidentes cerebrovasculares isquémicos empiezan sin ningún sangrado y luego
éste se presenta dentro del área dañada.
ACCIDENTE CEREBROVASCULAR HEMORRÁGICO:
Un
accidente cerebrovascular hemorrágico ocurre cuando un vaso sanguíneo en parte
del cerebro se debilita y se rompe, provocando que la sangre se escape hacia el
cerebro. Algunas personas tienen defectos en los vasos sanguíneos del cerebro
que hacen que esto sea más probable. El flujo de sangre después de la ruptura
del vaso sanguíneo causa daño a las células cerebrales.
RIESGOS
DEL ACCIDENTE CEREBROVASCULAR:
La
hipertensión arterial es el factor de riesgo número uno para accidentes
cerebrovasculares. Los siguientes factores también incrementan el riesgo:
- Fibrilación
auricular
- Diabetes
- Antecedentes
familiares de la enfermedad
- Cardiopatía
- Colesterol alto
- Aumento de
la edad
Ciertos
medicamentos incrementan las probabilidades de formación de coágulos y, por lo
tanto, aumentan las posibilidades de sufrir un accidente cerebrovascular. Las
píldoras anticonceptivas pueden aumentar las posibilidades de tener coágulos
sanguíneos, especialmente en mujeres que fuman y tienen más de 35 años.
Los
hombres tienen más accidentes cerebrovasculares que las mujeres; sin embargo,
estas últimas tienen un riesgo más alto de presentar un accidente
cerebrovascular durante el embarazo y en las semanas inmediatamente posteriores
a éste.
Los
siguientes factores incrementan el riesgo de sangrado dentro del cerebro, lo
cual lo hace a uno más propenso a sufrir un accidente cerebrovascular:
- Consumo de
alcohol
- Trastornos
hemorrágicos
- Consumo de
cocaína
- Traumatismo
craneal
Los síntomas
Los
síntomas del accidente cerebrovascular dependen de qué parte del cerebro esté
dañada. En algunos casos, es posible que una persona ni siquiera se dé cuenta
de que ha tenido un accidente cerebrovascular.
Los
síntomas generalmente se presentan de manera súbita y sin aviso o pueden
ocurrir a intervalos durante el primero o segundo día. Los síntomas por lo
general son más greves apenas sucede el accidente cerebrovascular, pero pueden
empeorar lentamente.
Se
puede presentar un dolor de cabeza,
especialmente si el accidente cerebrovascular es causado por sangrado en el
cerebro. El dolor de cabeza:
- Comienza
repentinamente
- Ocurre al
estar acostado
- Despierta a
la persona
- Empeora
cuando se cambia de posición o cuando se agacha, hace esfuerzo o tose
Otros
síntomas dependen de la gravedad del accidente cerebrovascular y de la parte
del cerebro afectada. Los síntomas pueden abarcar:
- Cambio en la
lucidez mental (incluyendo coma, somnolencia y pérdida del
conocimiento)
- Cambios en
la audición
- Cambios en
el sentido del gusto
- Torpeza
- Confusión o
pérdida de memoria
- Dificultad para
deglutir
- Dificultad
para leer o escribir
- Mareos o
sensación anormal de movimiento (vértigo)
- Falta de
control de esfínteres
- Pérdida del
equilibrio
- Pérdida de la
coordinación
- Debilidad
muscular en la cara, el brazo o la pierna (por lo regular sólo en un lado)
- Entumecimiento
u hormigueo en un
lado del cuerpo
- Cambios
emocionales, de personalidad y estado de ánimo
- Problemas
con la vista, incluyendo disminución de
la visión, visión
doble o ceguera total
- Cambios en
la sensibilidad que afectan el tacto y la capacidad para sentir el dolor,
la presión, las temperaturas diferentes u otros estímulos
- Problemas
para hablar o entender a otros que estén hablando
- Problemas
para caminar
Pruebas y exámenes
Se
debe llevar a cabo un examen físico y neurológico completo. El médico:
- Verificará
si hay problemas con la visión, el movimiento, la sensibilidad, los
reflejos, la comprensión y el habla. El médico y las enfermeras repetirán
este examen con el tiempo para ver si el accidente cerebrovascular está
empeorando o mejorando.
- Auscultará
para ver si hay un ruido anormal, llamado "soplo", al usar un
estetoscopio para escuchar las arterias carótidas en el cuello. Un soplo
es causado por flujo sanguíneo turbulento.
- Revisará y
evaluará la presión arterial, la cual puede estar alta.
Los
exámenes le pueden ayudar al médico a determinar el tipo, la localización y la
causa del accidente cerebrovascular y descartar otros trastornos que pueden ser
responsables de los síntomas.
- Una tomografía
computarizada del cerebro a
menudo se realiza poco después del comienzo de los síntomas del accidente
cerebrovascular. Asimismo, se puede hacer una resonancia
magnética del cerebro en
lugar o después de ésta.
- Se puede
realizar una angiografía por
resonancia magnética (ARM)
o angiografía por tomografía computarizada para ver si hay vasos
sanguíneos anormales en el cerebro que puedan haber causado el accidente
cerebrovascular.
- Se puede
hacer una ecocardiografía si el accidente cerebrovascular
pudo haber sido causado por un coágulo sanguíneo proveniente del corazón.
- Un dúplex carotídeo (un tipo de ecografía) puede
mostrar si el estrechamiento de las arterias del cuello (estenosis
carotídea) llevó a un accidente cerebrovascular.
- Una angiografía de
la cabeza puede
revelar cuál vaso sanguíneo está bloqueado o sangrando y ayudarle al
médico a decidir si la arteria se puede reabrir usando una sonda delgada.
- Los exámenes
de laboratorio incluirán un conteo
sanguíneo completo (CSC), tiempo de sangría y exámenes de la coagulación
sanguínea (tiempo de
protrombina o tiempo parcial
de tromboplastina).
También se verificará en nivel de azúcar y colesterol en
la sangre.
- Un electrocardiograma (ECG) y un monitoreo del ritmo
cardíaco pueden ayudar a determinar si un latido cardíaco irregular
(como fibrilación
auricular) causó el
accidente cerebrovascular.
- También se
puede efectuar una punción raquídea (examen del líquido
cefalorraquídeo).
El tratamiento
Un
accidente cerebrovascular es una emergencia médica. El tratamiento inmediato
puede salvar vidas y reducir la discapacidad. Llame al número local de
emergencias (112 en España) o busque atención médica inmediata ante los
primeros signos de accidente cerebrovascular.
Es
muy importante para las personas que están experimentando síntomas de un
accidente cerebrovascular llegar al hospital lo más rápidamente posible. Si el
accidente cerebrovascular fue causado por un coágulo sanguíneo, se puede
administrar un fármaco trombolítico para disolverlo.
La
mayoría de las veces, los pacientes deben llegar al hospital dentro de un
período de tres horas después del comienzo de los síntomas. Algunas personas
pueden ser capaces de recibir estos fármacos hasta por 4 a 5 horas después del
inicio de los síntomas.
El
tratamiento depende de la gravedad y causa del accidente cerebrovascular. Se
requiere hospitalización para la mayoría de los accidentes cerebrovasculares.
TRATAMIENTO EN EL HOSPITAL
Los
trombolíticos (terapia trombolítica) se pueden usar si el accidente
cerebrovascular es causado por un coágulo de sangre. Dichos medicamentos disuelven
los coágulos de sangre y ayudan a restablecer el flujo sanguíneo al área
dañada. Sin embargo, no todas las personas pueden recibir este tipo de
medicamento.
- Para que
estos fármacos hagan efecto, la persona debe ser examinada y tratada
dentro de las tres primeras horas siguientes al inicio de los síntomas. Se
debe realizar una tomografía computarizada para ver si el accidente
cerebrovascular es por un coágulo o sangrado.
- Si el
accidente cerebrovascular es causado por sangrado en vez de coagulación,
los trombolíticos pueden causar más sangrado.
Otros
tratamientos dependen de la causa del accidente cerebrovascular:
- Los
anticoagulantes, como heparina o warfarina (Coumadin), se pueden utilizar
para tratar accidentes cerebrovasculares debidos a coágulos sanguíneos.
También se puede utilizar ácido acetilsalicílico o clopidogrel (Plavix).
- Se pueden
necesitar otros medicamentos para controlar otros síntomas, incluyendo
hipertensión arterial. Los analgésicos se pueden administrar para
controlar el dolor de cabeza severo.
- En algunas
situaciones, radiólogos expertos y un equipo especial para accidente
cerebrovascular pueden emplear una angiografía para resaltar el vaso
sanguíneo obstruido y destaparlo.
- En caso de
accidente cerebrovascular hemorrágico, a menudo se requiere cirugía para
extraer la sangre que se encuentra alrededor del cerebro y reparar los
vasos sanguíneos dañados.
- Se puede
necesitar cirugía en la arteria carótida.
Pueden
ser necesarios nutrientes y líquidos, en especial, si la persona presenta dificultades
para deglutir. Éstos se pueden suministrar a través de una vena (intravenosos)
o una sonda de alimentación en el estómago (sonda de gastrostomía). Las
dificultades para deglutir pueden ser temporales o permanentes.
La
fisioterapia, la terapia ocupacional, la logopedia y la terapia de deglución se
iniciarán todas en el hospital.
TRATAMIENTO A LARGO PLAZO
El
objetivo del tratamiento después de un accidente cerebrovascular es ayudarle al
paciente a recuperar la mayor funcionalidad posible y prevenir accidentes
cerebrovasculares futuros.
El
tiempo de recuperación y la necesidad de tratamiento a largo plazo difieren de
una persona a otra. Los problemas para movilizarse, pensar y hablar con
frecuencia mejoran en las semanas o meses después de un accidente
cerebrovascular. Muchos personas que han tenido un accidente cerebrovascular
aún seguirán mejorando en los meses o años después de éste.
El pronóstico
El
pronóstico depende del tipo de accidente cerebrovascular, de la cantidad de
tejido cerebral dañado, de qué funciones corporales están afectadas y de la
prontitud para recibir el tratamiento. La recuperación puede ocurrir por
completo o puede haber alguna pérdida permanente de la función.
Más
de la mitad de las personas que tienen un accidente cerebrovascular son capaces
de desempeñarse de manera independiente en el hogar.
Si
el tratamiento con trombolíticos tiene éxito, los síntomas de un accidente
cerebrovascular pueden desaparecer por completo. Sin embargo, los pacientes con
frecuencia no llegan al hospital a tiempo para recibir estos fármacos o hay
afecciones médicas complicadas que impiden su uso.
Las
personas que tienen un accidente cerebrovascular isquémico (accidente
cerebrovascular debido a un coágulo de sangre) tienen una mejor probabilidad de
sobrevivir que aquéllos que tienen un accidente cerebrovascular hemorrágico
(accidente cerebrovascular debido a sangrado en el cerebro).
El
riesgo de un segundo accidente cerebrovascular es más alto durante las primeras
semanas o meses después del primero y luego empieza a disminuir.
Posibles complicaciones
- Bronco
aspiración de alimento (aspiración)
- Disminución
del período de vida
- Dificultad
en la comunicación
- Fracturas
- Desnutrición
- Espasticidad
muscular
- Pérdida
permanente de las funciones del cerebro
- Pérdida
permanente del movimiento o la sensibilidad en una o más partes del cuerpo
- Problemas
debido a la pérdida de movilidad, incluyendo contracturas articulares
y úlceras de decúbito
- Disminución
de la capacidad para desempeñarse o cuidarse
- Disminución
de la interacción social
- Efectos
secundarios de los medicamentos
Prevención
Para
ayudar a prevenir un accidente cerebrovascular:
- Evite los
alimentos grasos. Siga una dieta saludable y baja en grasas.
- No beba más
de 1 a 2 tragos de alcohol por día.
- Haga
ejercicio en forma regular: 30 minutos al día si no tiene sobrepeso y de
60 a 90 minutos si lo tiene.
- Hágase
revisar la presión arterial al menos cada 1- 2 años, especialmente si
la hipertensión
arterial es
hereditaria.
- Hágase
revisar el colesterol. Si está en alto riesgo de accidente
cerebrovascular, el colesterol "malo" LDL debe estar por debajo
de 100 mg/dL. Es posible que el médico le recomiende que intente reducir
el colesterol LDL hasta 70 mg/dl.
- Siga las
recomendaciones de tratamiento del médico si presenta hipertensión
arterial, diabetes, colesterol y cardiopatía.
- Deje de
fumar.
La
terapia con ácido acetilsalicílico o Aspirina (81 mg al día o
100 mg cada dos días) se recomienda para la prevención del accidente
cerebrovascular en todos los hombres que tengan factores de riesgo de sufrirlo
y en las mujeres menores de 65 que también estén en riesgo, en tanto los
beneficios superen dichos riesgos. Se debe considerar para mujeres de más de 65
años sólo si su presión arterial está controlada y si el beneficio es mayor que
el riesgo de sangrado gastrointestinal y hemorragia cerebral. Pregúntele a su
médico si el ácido acetilsalicílico (aspirina) es apropiado en su caso.
El
médico también le puede recomendar que tome ácido acetilsalicílico u otro
anticoagulante si ha tenido un accidente isquémico transitorio o un accidente
cerebrovascular en el pasado o si actualmente tiene:
- Insuficiencia
cardíaca congestiva
- Latidos
cardíacos irregulares (como fibrilación
auricular)
- Válvula
cardíaca mecánica
- Otros
factores de riesgo para accidente cerebrovascular
Un
tipo de cirugía llamada endarterectomía carotídea puede
ayudar a evitar que ocurran nuevos accidentes cerebrovasculares en personas con
grandes obstrucciones en las arterias del cuello.
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